Cantidad de vidas observan en la cercanía intentando sumarse, en la segunda
imagen un pequeño y decidido duende de
vestimenta color castaño varita en mano muy cercano convoca, su varita notamos,
despide un fulgor, así como en los cuentos en los que las varitas mágicas
despiden estrellas.
Un mundo fantástico sin duda, a pesar de ello muchos codician regresar, extrañan sobremanera, requieren del cariño de aquellos que un día fueron
parte de su vida y ahora quedaron atrás.
Para finalizar corresponde indicar que aunque el otro paso sea por demas
asombroso, no lo es tanto como para permitirnos alcanzar a plasmar lo que
dejamos pendiente en este terrenal espacio, principalmente hay algo que se
eternizara y es la falta de comunicación, así que amigos, no permitan que
llegue el momento sin dejar bien en claro nuestros sentimientos hacia los seres
que nos rodean, ahora y frecuentemente, no es nada complicado expresar un
simple te quiero, nos aliviara llegado
el instante.
En la primera imagen ejecutamos
inversión de colores, trabajo que nos permite apreciar mejor, la segunda
nos muestra dentro del círculo al duendecillo y otros seres que se dirigen
hacia el claro.
Buena vida
Pablo y Ana
Borsani