Todos… son el árbol.

El señor de la fotografía pareciera estar en el árbol, pero no es así; pasaron muchos años desde aquel primer encuentro y hoy podemos decir que este señor junto a otros, a los que igualmente se los puede encontrar tal como a él, todos… son el árbol.

Tenemos una idea sobre el ser vegetal, sabemos que respiran, sabemos que poseen circulación, entre otras tantas virtudes de los seres vivos; porque claro es que  las plantas tienen funciones similares a la del humano; en lugar de sangre, savia elaborada; en vez de pulmones hay estomas en donde se realiza un intercambio de gases; En vez de venas y arterias se encuentran vasos leñosos. La única diferencia es que la planta es autótrofa y el humano es heterótrofo*.

Pero… nunca nos han dicho que además tienen alma y rostro que los identifica al igual que a nosotros los humanos y claro aquí los presentamos, si bien su revelación hace ya tiempo fue formalizada en estas páginas, ustedes pueden investigar lo dicho y presentado ya que no es patrimonio nuestro sino de todos aquellos que estén dispuestos a descubrir.

Abraza la vida, envuelve el tronco de un árbol con tus extremidades, afirma tu pecho y siente a un afectuoso amigo dar empuje, todo y todos somos iguales ante la vida, solo hay que abrir la ventana del entendimiento y cerrar las puertas a la negación, disfruten, estar vivo es muy bueno pero vivir es maravilloso!!!

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

* http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0185-26982004000100006

 

Para el conocimiento

Como es habito a nuestro paso el saludo, puesto que todo tiene vida y esta se encuentra expectante, no todo tiene movimiento pero si similitud, aunque no demos cuenta de ello para el conocimiento aquí los presentamos.

En imagen un árbol como todos los árboles, vemos que cambian las formas visibles aunque, si buscamos con detenimiento veremos que el parecido es notorio, y esto es asi aunque usted no lo crea.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

Un rostro, nuestra propia energía

 Rostros, Rostros y más rostros, aspectos que más que de ellos son nuestros, piezas de la misma energía que nos compone esparcidas por doquier, hermanos aunque así no lo entendamos, hoy en vestimenta humana y mañana quizás….., todo es parte del todo, nada es único, todo depende del otro y cada movimiento implica más movimiento, por ello hemos de darlos acertadamente.

Observamos en imagen un tronco el cual fuera utilizado para fogata, en el un rostro de parecido humano o bien diríamos un rostro de nuestra propia energía en un lugar no humano, un árbol en este caso era el poseedor de nuestra energía lo cual indica que sin importar las formas exteriores todo está conectado, que sin importar las formas visibles lo que hagamos al otro repercute en nosotros.

No dejemos huellas de nuestro andar, respetemos el todo, será respetarnos a nosotros mismos.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani