Cantidad de personas agrupadas en proximidad del radiante ser,
figura de apariencia papal, la que en su mano blande una batuta refulgente. Más
arriba, en lo alto, figuras angelicales danzan fortaleciendo el paradisiaco espectáculo.
Intenso momento,
magnífica obra celestial la que nos han regalado, creímos justo no entorpecer,
por ello decidimos dejar paso a la semana para retornar el próximo domingo, la
idea no nos abandonaba, era puntual volver al sector para colectar más información
y de ser posible conocer al celestial individuo.
Próximos al terreno
que había oficiado de escenario, solicité el favor de estar frente a la eminente presencia que días pasados había
conducido la reunión, menuda sorpresa la nuestra, de lo alto del árbol asomo
un ser radiante, el que escucho detenidamente mi discurso. Solicite su aprobación
para presenciar un nuevo evento, si bien
desconocía de qué se trata, sencillamente la idea me llenaba el alma.
Aunque la
respuesta al momento no llego, mantenemos la esperanza y continuaremos siendo aplicados
visitantes del lugar.
Sin duda
nuestro enfoque penetra en el célebre Paraíso,
cuya sucursal existe aquí en la tierra, humanos, actuemos con prudencia, preservemos
el habitad, nos llegara el
agradecimiento desde el reino de los cielos.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani