martes, 10 de junio de 2014

Reunión de allá, invitados de acá

Muchos participaron, lugar de encuentro como de costumbre, cuestión a tratar, tema libre,  no obstante, la mayoría coincidió en expresar su afecto,  ciertamente nos sentimos muy cuidados en todo momento, en la primer imagen la señora que se acerca a mi oído pareciera susurrar, si bien únicamente se aprecia el sonido del viento lo sintiera transformarse en música celestial que acompaña el momento.
Cantidad de vidas observan en la cercanía intentando sumarse, en la segunda imagen un pequeño y decidido  duende de vestimenta color castaño varita en mano muy cercano convoca, su varita notamos, despide un fulgor, así como en los cuentos en los que las varitas mágicas despiden estrellas.
Un mundo fantástico sin duda, a pesar de ello muchos codician regresar,  extrañan sobremanera,  requieren del cariño de aquellos que un día fueron parte de su vida y ahora quedaron atrás.
Para finalizar corresponde indicar que aunque el otro paso sea por demas asombroso, no lo es tanto como para permitirnos alcanzar a plasmar lo que dejamos pendiente en este terrenal espacio, principalmente hay algo que se eternizara y es la falta de comunicación, así que amigos, no permitan que llegue el momento sin dejar bien en claro nuestros sentimientos hacia los seres que nos rodean, ahora y frecuentemente, no es nada complicado expresar un simple  te quiero, nos aliviara llegado el instante.
En la primera imagen ejecutamos  inversión de colores, trabajo que nos permite apreciar mejor, la segunda nos muestra dentro del círculo al duendecillo y otros seres que se dirigen hacia el claro.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani



viernes, 6 de junio de 2014

El templo, nuestra alma

Las fotografías expuestas en este espacio, como único tratamiento se intensifican para optimizar su visión, una tras otra nos muestran la realidad que se escurre ante los ojos desentrenados.
La imagen que llega a ustedes, es lo que para distintas culturas ha sido el detonante que los indujo a venerar al dios del sol, fue venerado a lo largo de la Historia en muchas civilizaciones, como la egipcia, la mexica, la incaica, la china, la japonesa, la griega o en religiones como la hinduista, hoy nosotros tomamos conocimiento que elevadas existencias carentes de un cuerpo solido, al menos en este lado de la vida y aun conservando su forma, se reflejan tal como si de sombras chinescas se tratara, valiéndose de la iluminación proporcionada en este caso por el astro rey.
¿Entender seriamente en todo momento o simplemente elevar nuestros ruegos en los períodos de insuficiencia?, de nosotros depende la forma de apreciar, la forma de sentir la vida, lo que obtengamos de ella florecerá directamente proporcional a nuestro accionar. Ustedes como siempre tienen el poder en sus manos, ustedes eligen, si observar es suficiente, tan solo observen, si buscan mas allá de la observación solo deben aceptar y agradecer, observaran por fuera y sentirán por dentro, en lo profundo de sus almas, será el momento en que ya no será necesario tratar de entender, será el momento en que, estarán seguros, aunque sus ojos continúen ciegos, será una fiesta para el espíritu.
De ninguna manera proponemos inclinarlos hacia comunidad religiosa alguna, solo crean positivamente que el templo, es nuestra alma y el párroco, nosotros mismos. Como compensación a ese convencimiento y actuando en consecuencia recibiremos el primer estímulo que consistirá nada menos que en evolución personal, lo que, no es poca recompensa.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani

Tiempo divino tesoro

Al ver la imagen que acompaña la presente nota nos llega el recuerdo de aquel famoso poema del maestro Pedro B. Palacios (Almafuerte), al que nombró ¡PIU AVANTI! y escribió así:

No te des por vencido, ni aun vencido,
no te sientas esclavo, ni aun esclavo;
trémulo de pavor, piénsate bravo,
y arremete feroz, ya mal herido.
Ten el tesón del clavo enmohecido
que ya viejo y ruin, vuelve a ser clavo;
no la cobarde estupidez del pavo
que amaina su plumaje al primer ruido.
Procede como Dios que nunca llora;
o como Lucifer, que nunca reza;
o como el robledal, cuya grandeza
necesita del agua y no la implora...
Que muerda y vocifere vengadora,
ya rodando en el polvo, tu cabeza! 
Pedro B. Palacios

Vos árbol, que firme en tu terruño has contemplado las décadas pasar e inmutable has transitado cantidad de otoños y de nuevo vacío de hojas sueñas con otra primavera. Ten el tesón del clavo enmohecido que ya viejo y ruin, vuelve a ser clavo.
Buena vida planeta!!!
Pablo y Ana Borsani 

jueves, 5 de junio de 2014

Igual a un mágico cuento

Sorpresa la nuestra al descubrir diversos individuos trepando por la cuerda que desciende del morral, ya es hora avanzada, la penumbra cobra vida en el recinto de la capilla de Nuestra Señora de Itati,  lugar al que domingo tras domingo asistimos.
Debido a la media luz no se logran distinguir las formas pero,  ciertamente al tratarse de seres luminosos logramos sus siluetas,  afines a personajes componentes de un mágico cuento, ficción que relataran en nuestra infancia con regocijo nuestros mayores o, tal vez deseando mencionar una realidad difícil de narrar de otro modo.
El escenario ante sus ojos, ambicionamos disfruten de este maravilloso testimonio.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani



Formas de ignota constitución se lanzan por el aire,  pese a la escaza iluminación existente.

Muestra del morral y cuerda a la que hacemos mención.

Esbeltas piedras nos descubren su verdad

Simple y a la vista, un pilón de rocas conforman el cauce del rio, muy lejano de tal sentir, el buen observador en razón de su ojo diestro, las comprende en forma viva, siluetas conocidas, esbeltas piedras que nos descubren su verdad, posiblemente realidad que se sucede un poco más allá o acaso acá por razón de artilugios sorprendentes.
Presentamos dos imágenes, en la primera distinguirán las formas intensificadas a fin de una mejor comprensión, la segunda fotografía es original para aquellos que poseen el ojo diestro.
Disfruten de las maravillas del universo, ciertamente la creación no tiene domicilio fijo en este planeta, deducimos que tan solo ocupamos un lugar de privilegio dentro del armónico sistema.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani