El espíritu
del bosque observa con preocupación el
fuego que avanza, manos anónimas en un acto de salvaje desprecio por la
naturaleza, el igual y su misma alma, han iniciado un ataque que podría costar
la pérdida total de miles de especies arbóreas, sus habitantes y lo que es más,
el único espacio verde con que cuenta
nuestra ciudad se ve seriamente comprometido, agradecemos la rápida intervención de personal de bomberos zonal.
Las hojas caídas, y de hecho las ramas y árboles caídos, son
el suelo de este bosque, razón por la cual luego de una trabajosa tarea cometida
por los bomberos locales, se sumaron dos intervenciones en los días siguientes
debido a que el suelo en sus entrañas mantenía alta temperatura y cual volcán a
punto de estallido, volutas de humo germinaban como en espera de una brisa que
las convierta en llama.
Causa extremo dolor e impotencia ver en situación de riesgo a quien uno quiere y necesita, lo que podamos
hacer con nuestras manos, lo que construya el hombre sea cual fuere el elemento
podremos reconstruirlo, pero el daño a
la naturaleza no tendrá solución al menos en cientos de años.
Llevemos con dignidad el nombre que nos otorgamos “Ser Humano”, seamos humanos y porque no, humanitarios.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani
Imagen lograda mientras ocurrían los hechos.