Estamos sobre el andén y nada, se sube al tren y nada, pero al comenzar la marcha corremos detrás intentando decir todo lo que callamos cuando en realidad era el momento.
La eternidad o al menos cuanto quede por delante será en otra estación; abrazos, caricias, asistencia, presencia, un te quiero, todo esto y más ha de ocurrir acá.
Existir lo cuentan eterno, si, nosotros aseguramos que es más, pero vivir es un ahora.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani
Soledad, ingrato momento |
Si. Lamentablemente callamos más de lo que comunicamos, transmitimos. Lo más triste es que muchas veces no alcanzamos al tren, aunque más no sea,para gritarlo desde el andén. Otro tema al pié e la foto "Soledad, ingrata idea" Pobre de quién la elige, y más pobre quien no la puede evitar!!! Abrazos!
ResponderEliminar