Entre dos mundos

Luego de unas merecidas vacaciones, retornamos,  descanso en el cual ambicionábamos incluir todo lo cotidiano, conseguir un descanso de cuerpo y mente hubiera sido lo correcto para regresar renovados a emprender un nuevo año de trabajo.

Lugar elegido, la montaña, altas cumbres, ríos, montes naturales de espinillos y claro está, nuestros infaltables amigos en esta exuberancia natural nos expresaron “piedra libre”, y así tal como expusiéramos en cantidad de oportunidades, en el planeta todo encontramos seres del más allá que, a decir verdad no esta tan allá, más bien correspondería llamar “más acá” ya que, tan cercanos a nosotros despliegan sus actividades.

Diríamos en lo que nos concierne, entrando en la zona espiritual que vivir tal como nosotros vivimos es una obligación para llegar más allá, ciertamente no hay mejor obra que la que se sabe hacer, no podríamos conocer los sentimientos sin haberlos sentido, el mismo creador fue hombre para sentir y saber que se siente, como conocer el dolor sino duele, como conocer el amor sino se ha amado, como conocer la piedad sino se ha pecado.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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Final de pelicula

Cuando sientan que todo está perdido, cuando la desesperanza los aborde,  cuando el ser amado ya no esté, invitamos a revisar su equipaje.

El agua se transforma en vapor, el gusano en mariposa, la uva en vino y así podríamos seguir enumerando transformaciones, sin embargo la que nos ocupa es la propia que también sucede y lo mejor del espectáculo es que conservamos los recuerdos,  razón por la cual nos mantenemos cercanos a nuestros intereses, conocemos un caso en que el esposo aguardaba en un oculto lugar el momento de reencontrarse con su amada  para así, partir juntos.

Fin escriben en las películas, aunque, todavía quede cinta en el carrete. Si advirtiéramos todo, que quedaría por descubrir ?

Buena vida viajeros lectores

Pablo y Ana Borsani

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Comprender, será tan específico?

Cuestión delicada el comprender, nosotros más que nadie sabemos qué tanto, pero más allá de todo intento les proponemos seguir maravillándonos con imágenes que ven por nuestros ojos.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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