Inmaterial representación

En cada lugar la especie apropiada, sucede incluso con aquellos seres que escapan al golpe de vista, los que habitan refugiados en su inmaterial representación.
Las imágenes exteriorizan formas conocidas y otras que tal vez no lo son tanto, formados en otro territorio notamos el cambio, debemos acentuar que las presentes son fotografías logradas en zona montañosa a más de mil kilómetros de distancia de nuestro lugar de encuentro habitual.

El cuerpo no es más que un medio de volverse temporalmente visible. Todo nacimiento es una aparición. (Amado Nervo (1870-1919) Poeta, novelista y ensayista mexicano.)
Buena vida
Pablo y Ana Borsani   

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El espíritu del gran árbol

En lejanas épocas, cuando la tierra era habitada por nativos, ninguna decisión era tomada sin previamente consultar a los dioses, el hecho de vivir en la naturaleza los hacía grandes  conocedores del entorno, con seguridad observaban los que nosotros mostramos día a día en esta paginas.

De tratarse de aquella época diríamos que estas damas consultan al espíritu del gran árbol, grandioso verdad, vemos el rostro del gran árbol con sus ojos apuntando hacia abajo observando a las féminas visitantes.

Obviamente no podemos despedirnos sin antes solicitar sean amables con la naturaleza, se trata de vida con valor agregado, sostén de la existencia en el planeta tierra.

Buena vida.

Pablo y Ana Borsani

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Pequeños gigantes de la creación.

Pequeños nativos al servicio de la naturaleza, criaturas que en el mayor silencio despliegan su tarea, mano derecha del medio ambiente, pequeños gigantes de la creación.

En esta entrada algunas fotografías que nos revelan  la existencia de criaturas de corto tamaño pero de extremo valor para el entorno, a los que deberíamos nombrarlos señores naturaleza. Disfruten, están muy bien atendidos, el creador nada ha olvidado para que nuestro paso sea lo más cómodo posible.

Súmense, sean naturales, defiendan el planeta, es imperiosa la inmediata mayoría, se desciende más rápido de lo que se asciende y ahora marchamos cuesta abajo, no olviden la importancia de plantar un árbol o al menos  impedir la destrucción de los ya plantados, entre otras pequeñas grandes cosas.

Recordamos una  profecía de los indios Cree que auguraba:

"Cuando el hombre contamine el último río, corte el último árbol y atrape el último pez, se comerá su propio dinero".

Los cree forman un grupo nativo norteamericano de más de 200.000 individuos, lo que lo convierte en uno de los mayores grupos de Canadá.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani