Vemos que
todos los rincones de la tierra se encuentran habitados, indudable que cada ser
tiene su función natural, indudable que son parte de los engranes.
Indicar que
debemos respetar la naturaleza ya queda obsoleto, al ver estas presentaciones corresponde obrar
con seriedad, dando por seguro que estamos ultrajando el tan referido y poco
conocido Edén, que hospeda cantidad de formas disímiles de vida y
maravillas por doquier.
Poco
conocido puesto que, si bien lo recorremos debemos cultivar nuestro sentido
común para conocerlo en detalle, de otro
modo permanecerá oculto.
Buena vida, poseen todas las herramientas.
Pablo y Ana
Borsani
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