Quienes son aplicados
concurrentes a nuestras publicaciones sabrán que intentamos no contaminarlos
con nada de lo ya expuesto, procuramos mostrar nuestra propia exploración y por
cierto que la vida nos da oportunidades.
Sabíamos por
nuestros amigos los Gnomos que la miel y dulces que periódicamente arrimamos eran transportados por ellos hacia
sus hogares para disfrutarlos en familia, si bien nunca alcanzamos a observar
el momento en que este hecho sucedía, es corriente encontrar los
recipientes vacíos de contenido.
La imagen
nos ilustra el emocionante instante en que descubrimos un visitante al borde
del dulce recipiente ubicado sobre las ramas de la higuera que se eleva en
nuestro jardín, no queremos opinar a que grupo pertenece para no crear falsas
expectativas, pero crean, nunca dejen de creer porque lo que nos hace calificar
es solo una pensamiento, la verdad es otra cosa y está esperando a ser
descubierta para bien de todos los corazones.
Buena vida
Pablo y Ana
Borsani