Las Almas errabundas
ganan ubicación sobre los tallos leñosos de los árboles, resultan un positivo alivio
y recarga de energía luego del seguido ir y venir. Desde la corteza la esencia
del hombre calladamente reposa y examina el entorno, asombrosos y amigables árboles,
proveedores de vida y próximo bálsamo.