Así como una
hilacha suelta al tironear descose la prenda, así la naturaleza, un prodigio de
unión y dependencia.
Simpaticemos
con nuestro habitad, sepamos que la
muerte no es tal, más luego necesitaremos de todo lo reservado en el presente.
Del manzano
derribado no proceden frutos.
Buena vida
Pablo y Ana
Borsani
Fotografiados en plena noche