Que los vemos, que no los vemos, que creemos, que no creemos y en él mientras tanto la realidad pasa y nos observa impávidos.
El cambio se da con el comprender, así ocurrió en tiempo de tomar la presente imagen, fotografía que eternizo el instante en que Ana y sus amigos tan reales como su misma presencia disfrutaban de la bella tarde.
Suelta las riendas y buena vida
Pablo y Ana Borsani