Raza humana

Una especie que tan solo ha vivido en la Tierra el 0,004 por ciento de la historia del planeta, concluimos que es muy breve tiempo para afanarse en dar instrucción, indudablemente aún es período de aprendizaje, tiempo de observar y actuar en el sentido que nos propone la naturaleza, máxime si hemos proyectado permanecer.

El apóstol Pablo indicó que el Diablo, que es como un león rugiente, trata de devorar a quienes están en ignorancia. No toleremos ser devorados por nuestra propia tosquedad.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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Naturaleza manifiesta

Creer o negar no modifica el rumbo, frente al asombroso escenario que nos envuelve las palabras resultan insignificantes, inclusive nuestras conclusiones parecen superficiales, conclusiones humanas validas únicamente para el contexto humano. 
Observamos una naturaleza manifiesta, en ciertos casos se desarrolla más allá de la capacidad de comprensión, entender no solo es tarea del discernimiento, sino labor de todos los sentidos.

En la fotografía distinguimos a Ana jugando con un pequeñín que se encuentra parado sobre su palma, pequeñín que no notamos en la presente imagen, pero si advertimos en proximidad un entorno sumamente amigable compuesto por naturales de este asombroso sistema, individuos de los cuales nos consideramos parte, notarán en la fotografía determinadas marcas a modo de ayuda, comenzamos a señalar la ubicación de cada uno pero, desistimos al notar que es tarea insostenible.

Repetidamente la señal es la cruz, incuestionable  guía del camino certero, en este caso pueden advertirla sobre la cabeza de uno de los señores que poseen la marca circular en el sector izquierdo de la imagen.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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Un señor en las alturas

Allí en el punto más elevado del eucaliptus, distinguimos a un señor de aspecto austero, vestido con largo ropaje a manera de peregrino,  observamos su mano derecha tendida sobre una titánica vara, tenemos motivos para creer que se trata de la imagen del Bendito San Roque, protector ante la peste y toda clase de epidemias, es además protector de peregrinos, enfermeros, cirujanos o cánidos, entre otros.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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Solo el corazón, sabrá descubrir

Los afectos del pasado reaparecen, la clave consiste en concederle tiempo al tiempo, aquellos que ya se han ido un día retornaran muy cercanos, su perfil desigual mantendrá oculto aquello que únicamente el corazón sabrá descubrir.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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En busca de una amiga

A simple vista, tan solo una piña de pino que ha caído a tierra, escuetamente un contenedor de simientes para aquellos que creen conocerla, pero en realidad es más, conforme a nuestras investigaciones hallamos que poseen espíritu, ya sea por ser elegidas como morada de seres inmateriales, o acaso por ser poseedoras de propia energía. Situación que aún no tenemos en claro, si bien inquirimos, aun no llega la respuesta apropiada.

En la fotografía distinguimos el brazo de Ana que revuelve la maleza en busca de una conocida amiga, en este caso se trata de una joven piña cuyo espíritu se anima cada domingo, ella disfruta así tanto como nosotros del regular  encuentro.

Se nos dificulta insinuar esta realidad a los exploradores que recogen piñas a los fines de iniciar la fogata hogareña, según nos cuentan resultan optimas para esa necesidad, en diversas oportunidades hemos dialogado tratando de explicar lo inexplicable,  pero claro está, mejor que mil palabras una imagen para comprender de que se trata.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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Desde el pais de las maravillas

Y para todos los habitantes del planeta tierra,  presentamos con agrado mas fotografías que apuntalan lo ya expuesto y nos descubren que el mundo de la imaginación tan solo disimuló la fantástica realidad que es estar acá.
Fotografías que exponen aquello que personajes tales como el conocido Walt Disney, adelantado a estos tiempos de información, nos exhibían como protagonistas de sus fabulas, figurantes no tan figurados, actores que de otra manera hubiera sido muy embarazoso exponer, hadas, gnomos, duendes, y tantos más que hicieron y hacen aun hoy las delicias de grandes y chicos, son una concluyente realidad explicados de manera genial y sutil.
Las maravillas ahí están, la fantasía tan solo es el diario vivir, maravillosos del mismo modo nosotros, y ya ven, invariablemente llegamos al idéntico punto, la plataforma de la obra del creador, saber apreciar.
Buena, fantástica y maravillosa vida amigos!!!
Pablo y Ana Borsani

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Un cargamento de agradables emociones

Mencionar la palabra allá es referirse a un lugar lejano e indeterminado. Inexacto seria aplicarla para indicar la posición de nuestros amiguitos, los advertimos junto a nosotros cotidianamente, como pensar que allá es donde residen, más preciso seria darse cuenta que acá es su territorio, nuestro territorio, el de todos los seres vivientes que pueblan el planeta, no hay posiciones mágicas, solo hay quienes los distinguen y quienes no lo hacen, nuestra visión y su contextura juegan un papel importante, ellos están acá junto a nosotros, así nos ocurrirá llegado el tiempo, así como mudos observadores que permanecen ilusionados con una humana bienvenida.
Quitemos nuestro más íntimo cerrojo, cedámosles el paso, se revelaran plenos, trasladan con ellos un cargamento de agradables emociones.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani

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Desde el celestial y terrenal, Paraíso

Advertíamos en la nota anterior el diferenciado rostro de una mariposa, trabajosamente podemos notar que se trata de una imagen compuesta por tres individuos, sospechamos que uno de ellos es una fémina, ocurre que las mariposas hembras y machos sueltan feromonas en el ambiente, cuando lo hace una hembra, los machos lo detectan desde casi a 1,5 km de distancia, así es que una vez que el macho localiza a la hembra, agitara sus alas muy rápido soltando una nube de pequeñas escamas sobre las antenas de la hembra, estas escamas contienen feromonas y crean como una cierta carga sexual en ella, así es que cuando la bella dama detecta las feromonas queda dispuesta para aparearse.

Era el momento del llamado, cantidad de mariposas revoloteaban en busca de un amor, así es que aquella dama inicialmente exhibida no fue el único ejemplar que nos obsequio su imagen, ahora y en la que a continuación presentamos, notaremos el rostro del que posiblemente fuere el cautivante varón, decidimos exhibirla sin intervenir en su composición, así tal como fue obtenida,  por tal motivo aconsejamos acrecentarla desde el vínculo a tal efecto y observar con prolijidad este maravilloso enfoque que al momento la madre naturaleza nos permite considerar.

Desde el celestial y terrenal Paraíso, con el permiso dado por quienes con celo reservaron un poco para el ahora y otro poco para el después, anticipamos vistas que bien podríamos calificar extraídas de sorprendentes fábulas,  pero que tan solo son, una realidad alucinante de la cual participaremos en algún incierto punto del camino.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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Monarcas de un mundo, que no adivinamos.

Cuando mencionamos que este tan solo es el prologo es porque sabemos que hay mucho camino por recorrer, entendemos que nos han dejado las puertas abiertas, circunstancia que si bien no es casual, imposible desaprovechar, observamos desde una  perspectiva delicada de explicar, a no ser a causa de que imagen tras imagen documenta lo expresado. En la siguiente fotografía desprovista de retoques presentamos tres hermosas mariposas de la variedad Monarca (Danaus plexippus), donde veremos a una de ellas descubrirse por completo frente a nuestra cámara.

De llegar el día en que el humano adivine su entorno, dicha fecha correspondería ser instaurada como el día del mundo todo, sin temor, operemos como humildes comunicadores, el planeta con urgencia nos necesita!!!.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani 

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Por nombre, Paraíso

Escríbeles,  expresó con enérgica voz, anuncia que existe un territorio apartado,  un lugar al que han nombrado  Paraíso, descríbeles portentos, cuéntales sobre este terreno de asombrosas maravillas,  vivirán alentados imaginando un lugar ideal,  bienaventurados quienes intuyan que en el habitan.
Buena vida
Pablo y Ana Borsani

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Encuentro con la vida

Superando la muralla, imágenes que nos inspiran más allá de la opinión, por sobre creer o negar, el escenario prevalece ante toda sentencia, la verdad como única privilegiada.

Ingredientes exceden para añadir, no obstante, lo trascendental es su sentir amigo lector, aprecie y acomódese a gusto en su butaca, que este tan solo es el prólogo.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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Sorprendente naturaleza

Sutil, así como aquel 21 de febrero de 2013 bautizamos a este sitio, expresión cuya definición hace gala de su riqueza, fina, delicada, tenue, aguda, perspicaz, ingeniosa, improbable ubicar términos más puntuales para definir naturaleza.

Entendemos al punto de cada revelación algo más, opinando que la suma de revelaciones es elevada, no obstante tenemos el convencimiento de que hay más aguardando ser sorprendido. 

Disfruten de la serenidad que otorga el conocimiento, de esta nueva visión del entorno y porque no de nosotros mismos, tornémonos comunicadores existiendo a manera de afectuosos naturales componentes de este majestuoso planeta nombrado Tierra.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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Lejana época de floreros.

Observemos el rostro de este ejemplar florífero en particular, variedad cuya tipificación desconocemos, cuanto menos a nosotros nos produce la urgente necesidad de pensar en darle otra utilidad  a los escasos floreros que conservamos.

Estrictamente la naturaleza en imágenes, imágenes que no ingresan en todas las pupilas  de  igual forma, evidentemente sucesos y actores rematan la magia creadora, inspiración divina que conjuntamente incorporo al ser humano otorgándole una butaca de primera hilera.

Todo es substancia, el planeta es vida, vida que facilita la supervivencia, gracias a los unos existimos los otros, coexistamos generosos y agradecidos.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani 

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Ampliación de tan bella flor

De Duendes y cabriolas

Transitando el bosque tropezamos con una bella personita, con suma destreza ejercitaba sus cabriolas,  ubicada en lo alto del anciano eucaliptus  componía actos de acrobacia en tela, claro está que realizaba el entrenamiento muy lejos de adivinar la cantidad de espectadores que seguían sus gráciles movimientos, entre ellos y destacado en la fotografía el simpático duende que ocupa desde años atrás el añoso árbol.

Para vos: nunca olvides que se pueden cambiar las cosas con solo creer que son distintas, “solo cree”.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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En el teatro de la vida

Es evidente que enraizamos en un planeta de ensueño,  todo es substancia, todo pertenece al inmenso caldo de la existencia, son tan solo holgazanes nuestros sentidos, se limitan a comprender lo necesario, alcanzando rara vez aquello que un poco más allá abunda.

Las fotografías que siguen nos revelan una ínfima parte del auténtico escenario, el que difícilmente observamos.

Disfruten su subsistencia, están sobre el tablado, existen en el teatro de la vida, sinfín de actores componen la majestuosa obra.

Buena vida

Pablo y Ana Borsani

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Ampliación del original, observen detenidamente cada flor

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